Hacia una danza humanista / Ecléctico & Bailarines invitados

Reflexionar y/o pensar nuestro quehacer es una condición fundamental que nos lleva a mover nuestros límites, a cuestionarnos, ir más allá o saber por qué hacemos lo que hacemos, por qué no hacemos lo que queremos y qué hacer para llegar donde deseamos, entre otras muchas cosas.

En muchas ocasiones, esa reflexión y pensamiento se da en muchos niveles, no sólo de profundización del tema, sino de los lugares y los espacios donde se da, es decir, dicha reflexión muchas veces queda en un nivel de plática y ya. No es que esté mal, para nada; sin embargo, hay reflexiones que se ven en escena. Hay piezas y/o propuestas que te dejan con esa sensación de haber sido pasadas por pláticas intensas, cuyo resultado es un desplazamiento escénico de los lugares comunes.

Ecléctico & Bailarines Invitados es un colectivo de artes escénicas formado por Sergio Rojas e Israel Chavira cuya sede se encuentra en la ciudad de Morelia, Michoacán.

Presentaron Camaleónico 360°-La obra, una pieza muy sencilla y lúdica, llena de color, en el marco del Encuentro Estatal de Danza Contemporánea de Michoacán. Como su nombre lo indica, es una obra que cambia y puede hacerlo dependiendo del lugar, el momento y, sobre todo, del público. El colectivo activa una obra cuya base y fundamento son quienes están en las butacas, además de la búsqueda de intimidad, de identificación con las intérpretes. Y más allá, pareciera una cuestión no sólo de la obra sino un principio del colectivo en sí. La danza está, todo el tiempo está. Camaleónico se divide en cinco partes en la que está presente el juego, la improvisación, los cuerpos afectándose, el intercambio de roles. La danza está siendo todo el tiempo, pero es una danza sin pretensiones, sin rimbombancias (aunque técnicamente las intérpretes puedan hacerlo), que no busca generar la admiración técnica o la gran reflexión en su público. Sin embargo, lo que sí logra es el acercamiento a la danza en sí, la comunicación, el entendimiento respecto a lo que está sucediendo, no porque haya un tema claro pues lo que vemos son más bien abstracciones, movimiento en sí, trazos espaciales, dibujos en el espacio y escenas que cambian debido a la interacción y decisión del público. Y se logra el entendimiento y la caridad debido al diálogo y la explicación misma que las intérpretes van haciendo a lo largo de la obra.

¿Hasta qué punto podemos romper o desobedecer postulados básicos en la danza? La danza no se explica, en la danza no se habla, el que habla es el cuerpo. Y es cierto, y a partir de eso se construye mucha danza, muchas obras… hasta que hay quien decide no hacer caso, desobedientes, pues. Esto puede generar muchos conflictos, señalamientos, miedos, etc., mas el acto de hacerlo no sólo revela valentía y rebeldía, sino la conversación interna de un colectivo. Me explico con un ejemplo:

A mitad de la función un bebé comenzó a llorar. Todos sabemos que esto activa nuestro adultocentrismo, nuestra intolerancia y activa los resortes aprendidos del respeto al teatro, etc. Lo que sucedió fue que algunas personas comenzaron a callar al bebé. La mamá sintió la presión y se paró para salir de la sala. En ese momento, Sergio Rojas, quien estaba en el escenario le dijo: “No te vayas, no te vayas”.

Independientemente de discutir el tema de los niños o bebés en los teatros, lo que me gustaría señalar es el atrevimiento de una bailarina, una intérprete en escena, de actuar en el momento. En lo personal me parece un acto profundamente empático, que puso en evidencia que quien está en un escenario no está en un mundo aparte, que aunque esté ahí bailando está pendiente de lo que sucede. La bailarina no es ajena ni está afuera de su contexto. No se desentiende de lo que está ocurriendo. Se percata de algo y actúa. Eso me parece un acto político y empático notable.

Y no creo que eso haya ocurrido en el momento, que haya salido de su guion inexplicablemente. Para nada. Ese acto mínimo, acompañado de otros que ocurrieron en la función: el colectivo nos recibió en el teatro y nos dio los programas de mano (nos miraron), nos explicaron qué veríamos, nos hicieron preguntas, tomamos decisiones para la coreografía… esos actos revelan, repito, una conversación interna e intensa de un colectivo. No es improvisación, es una postura ante la danza y ante las y los demás. Y eso se da solamente reflexionando, debatiendo. Sólo así puedes tomar ese tipo de decisiones, sólo así puedes “faltarle el respeto al teatro”, a los límites de la danza y hacer una danza no para todas y todos sino CON todas y todos.

Para mí, ahí estuvieron los 360° que menciona el título, al sentirnos incluidos y al saber que quien está allá arriba no es ajeno a lo que sucede abajo como personas ni como espectadores. Eso permitió el goce de los cuerpos en movimiento y de la propuesta de un colectivo que hay que seguir de cerca.

Esta obra es la valoración del ser humano, nos demuestra un ego sin peso y sin protagonismo. Una danza vivencial donde todos somos parte de la solución; referente social para dejar en la reflexión.

Camaleónico 360° – La obra

Ecléctico & Bailarines Invitados

Coord. Coreográfica: Sergio Rojas Granados

Cocreación, intrpretación y textos: Teresa Gutiérrez, Guadalupe Rodríguez, Israel Chavira Leal y Sergio Rojas Granados

Video: ArtPoint Cooperativa de Talentos y SeRoGa

Vestuario: La Chikis Couture y EBI

1 Comment

  1. Felicidades a este gran equipo de artistas

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